Incluir en tu vida una rutina desde primera hora es una gran herramienta para empezar con buen pie y estar preparado para lo que te espera el resto del día. Soy de esas personas que les encanta levantarse antes para poder disfrutar de unos minutos de meditación, un desayuno tranquilo viendo las noticias o leyendo algo y revisar lo que tengo planificado para ese día en mi BuJo. A grandes rasgos esa es parte de mi rutina desde que me despierto.

Búhos versus alondras

Pero no todo el mundo tiene el mismo tipo de “reloj biológico” existiendo personas que encuentran su mejor momento al amanecer (alondras) y otros que lo encuentran cuando va cayendo el sol y pueden trasnochar sin ningún problema (búhos).

Sin embargo desde que empecé a interesarme por los temas de productividad y organización, siempre he leído las bondades de levantarse pronto y realizar una serie de rutinas, pero para mucha gente sigue siendo un suplicio el momento en el que suena el despertador y van apagándolo cada 10 minutos hasta que no les queda más remedio que levantarse y salir corriendo a su trabajo.

¿Cómo migrar de búho a alondra?

Si deseas poder despertarte sin reloj o, por lo menos, no sentir que es una tortura, haz lo siguiente: abre tu BuJo y dedica unos 5 minutos a pensar qué actividades te motivan más que estar durmiendo o en qué momentos te has levantado de la cama sin pensarlo porque ibas a realizar algo que te ilusionaba muchísimo y escríbelas en una lista:

• Sacar a tu mascota a pasear y tener tiempo para poder jugar con ella.
• Desayunar tranquilamente incluyendo algún alimento que se te haga la boca agua.
• Disfrutar del silencio de primera hora de la mañana.
• Salir a pasear con el fresquito de por la mañana.
• Empezar las vacaciones.

Cuando hayas finalizado la lista, decide cuáles son las actividades que más te motivan y que te va a resultar más sencillo integrar en tu día a día. No existe más secretos, lo único que importa es elegir como mínimo una actividad que sea tan buena que no quieras seguir en la cama.

Elige una actividad que sea tan buena que no quieras seguir en la cama. Clic para tuitear

Ya has dado el primer paso, ahora sólo te queda ir añadiendo una serie de acciones que te ayuden a empezar más animado el día:

• Cambia el sonido del despertador. Si eres de los que utilizan un pitido infernal porque no eres capaz de despertarte, ya no lo necesitas porque te encuentras motivado para levantarte. Ponte alguna canción o programa de radio que te dé buen rollo.
• Estírate. Dedica 5 minutillos a alguna serie de ejercicios que te ayuden a soltar los músculos después de dormir.
• Medita o, por lo menos, haz algún tipo de respiración profunda para empezar relajado.
• Sonríe. Ponte delante de un espejo y dedícate una sonrisa.
• Repítete alguna frase que te motive o escríbela en un post-it y pégala en algún sitio que sea de los primeros que mires.
• Bebe agua. Después de estar varias horas durmiendo tu cuerpo y, sobre todo, tu cerebro necesita hidratarse para empezar a funcionar.

Mi rutina mañanera y BuJo

Dependiendo de tu situación familiar y laboral y, el horario que puedas dedicar a tu nueva rutina, lo más sencillo es escribir en una página las acciones que vas a realizar desde que te levantas y el tiempo que quieres dedicar a cada una de ellas.

Otra opción, en el caso de que todos tus días no sean iguales es, crearte un pequeño calendario semanal con las primeras horas de la mañana (desde la hora que te levantas) e ir incluyendo a cada tarea una hora y tiempo de ejecución.

Y como cualquier hábito que quieres que entre en tu vida, haz un seguimiento de tu rutina y date un capricho si lo vas consiguiendo. Llegará un momento que encontrarás las tareas que mejor van contigo y las realizarás de forma automática como respirar.

¿Y cómo es tu rutina mañanera? ¿cuál es la actividad que te gustaría incluir y te resulta imposible de integrar en esa rutina?